La extensa sequía que se ha presentado a lo largo del año ha afectado a todo el país haciéndose sentir aún más en las provincias del norte afectando severamente a las producciones agrícolas.
Entrevistado por Suena a Campo, el Dr. Daniel Ploper, Director Técnico de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (EEAOC) señaló que la sequía ha afectado a todo el país y según estudios realizados, se trata de la peor sequía que hemos debido afrontar en los últimos 20 años.
Según Ploper, en el noroeste argentino es usual la sequía estacional entre los meses de abril y octubre, sin embargo, este año se ha agravado la situación debido a que el final del verano y comienzo del otoño se han presentado con registros de precipitaciones por debajo de la media por lo que los perfiles de los suelos no han recibido la recarga con la que normalmente se cuenta para sustentar los cultivos de invierno como ser el trigo y el garbanzo que son los más importantes en nuestra provincia.
“Partimos mal desde el comienzo con la campaña fina, sin agua almacenada en el suelo, esto ha impactado en los cultivos de invierno y luego la situación se ha agravado con las heladas que han sido de importante intensidad. Todo esto nos ha llevado a atravesar una mala campaña con rendimientos muy por debajo de lo normal” lamentó.
Con respecto a la campaña gruesa 2020/2021, el Doctor se mostró optimista y manifestó que todo dependerá de lo que ocurra de ahora en adelante con las precipitaciones a la vez que señaló, que las lluvias de los últimos días han sido escasas.
“Los productores deben empezar a preparar la nueva campaña. La primera tarea es tratar los lotes contra malezas lo que requiere de humedad en los suelos para que se activen las semillas de estas especies invasoras para así poder realizar las aplicaciones correspondientes. Creemos que la campaña va a comenzar retrasada, por el momento los pronósticos no son buenos” dijo.
En relación a las condiciones meteorológicas, el especialista explicó que en los últimos años se ha observado una tendencia a la baja en lo que refiere a precipitaciones, y dicha disminución podría extenderse por varios años más lo que mantiene preocupado al sector.
Además de los cultivos anuales, también los cultivos perennes como los cítricos o semi perennes como la caña de azúcar se han visto desfavorecidos, ante esto el entrevistado opinó que: “En los cítricos la situación es alarmante porque somos principales abastecedores de limón, y en Tucumán solo el 40% de la superficie implantada cuenta con sistemas de riego, en el restante 60% se ha podido observar defoliación y caída de frutos pequeños, es decir, que las perspectivas de esta producción son realmente poco promisorias”.
Por otro lado, Ploper dijo que el uso del agua debe ser una política de estado encarada seriamente con el fin de preservar y conservar los recursos y para ello es necesario realizar obras, no solo para el sector agrícola, sino también para el sector industrial y la sociedad en general.
Emergencia agropecuaria
Ante un pedido realizado recientemente por una entidad agropecuaria para que se declare la emergencia agropecuaria en Tucumán, el entrevistado opinó que la solicitud requiere de un período de análisis ya que existe una metodología para el cálculo de los daños ocasionados por un evento, en este caso la sequía.
Explicó, además, que en los casos en que se ha declarado la emergencia agropecuaria, el motivo fue la falta de precipitaciones en épocas normalmente lluviosas. En el caso de Tucumán la sequía invernal es común, sin embargo, en este caso, la situación se ha visto agravada por el déficit hídrico en el perfil de los suelos motivado por una recarga pobre en el final del verano.
“El agua es un elemento que tenemos que cuidar, en Tucumán no es escaso, entonces tenemos la posibilidad de realizar obras que nos permitan hacer un uso racional de este recurso. Hoy podríamos tener gran parte del área sembrada con los diferentes cultivos con disponibilidad de riego para mejorar la productividad” concluyó.