El Gobierno definió que la baja de retenciones a productos agroindustriales tiene fecha de vencimiento: junio. No obstante, aún no está claro si el pronunciamiento del presidente Javier Milei, respecto del carácter temporario de la baja, tiene que ver con un intento de acelerar la comercialización de granos durante los primeros meses del nuevo régimen cambiario, para llegado el momento prorrogar la reducción de los Derechos de Exportación (DEX). O, en todo caso, si el Gobierno realmente necesita más recursos fiscales para el segundo semestre y por tanto subirá el impuesto cumpliendo con lo establecido inicialmente. Aunque persisten dudas sobre si se revertirá o no, el impacto económico ya puede medirse. Volver a alícuotas más altas (33% para soja, 12% para maíz) recortaría hasta 74% la rentabilidad en zonas extrapampeanas, plantea Franco Artusso, investigador de la sección Productiva de la Fundación Mediterránea. Se trata de las regiones más alejadas de los puertos (comprende el norte de Córdoba, Santiago del Estero, Tucumán, centro-norte del país) y que no cuenta con las mismas aptitudes edafoclimáticas que la zona núcleo (sudeste de Córdoba, sur de Santa Fe, norte de Buenos Aires).
Señal negativa
Según el criterio del especialista, el fisco podría recaudar hasta U$S 930 millones extra si se revierten las alícuotas en el segundo semestre. “La señal sería negativa para un sector que espera la eliminación definitiva de los Derechos de Exportación”, fundamenta.
A cambio de una mejora fiscal de corto plazo (no mayor al 0,1% del Producto Bruto Interno), se corre el riesgo de frenar inversiones, limitar tecnología y desalentar la expansión en regiones con más desafíos, advierte. El agro responde a los incentivos: subir las retenciones puede costar más que lo que recauda. “El esquema vigente es un obstáculo para el crecimiento y la competitividad del sistema productivo”, se indicó desde el Ministerio de Desarrollo Productivo de Santa Fe, encabezado por Gustavo Puccini. El funcionario insistió en la necesidad de avanzar hacia un esquema fiscal que permita a las industrias y productores agropecuarios reinvertir en tecnología e innovación, fortaleciendo su posición en los mercados globales.
La Comisión de Agricultura y Ganadería de Diputados se prepara para enviar hoy una primera señal política al Gobierno: emitirá un dictamen que, en principio, buscaría bloquear cualquier intento de aumentar las retenciones al sector agropecuario. De prosperar en el Congreso, la iniciativa podría intensificar la presión sobre el oficialismo, especialmente considerando que tanto el presidente de la Nación como el ministro de Economía, Luis Caputo, ya anticiparon que el próximo 30 de junio vence la reducción transitoria de los derechos de exportación aplicados a los principales cultivos.
De todas maneras, el titular del Palacio de Hacienda mantuvo abierta una puerta a las expectativas del campo. “El Gobierno reducirá las retenciones al campo, si las condiciones macroeconómicas lo permiten”, expresó el ministro en una reciente entrevista.
(Fuente: La Gaceta)