La campaña de trigo 2025/26 arranca con señales alentadoras. El Informe de precampaña Nº 51 difundido por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires indica que se espera que la superficie sembrada alcance las 6,7 millones de hectáreas, con lo que se igualaría el máximo histórico registrado en la campaña 2021/22. Esto implica un incremento de un 6,3%, respecto del año anterior, y de un 6,7% en comparación con la media de las últimas cinco campañas.
La recuperación en la intención de siembra responde, principalmente, a una combinación de factores: la mejora en la disponibilidad hídrica, el pronóstico climático favorable para el otoño-invierno, una baja significativa en los costos de insumos y la expectativa de una leve recuperación de márgenes. Se estima que la producción total alcance las 20,5 millones de toneladas, lo que significaría un aumento de un 10,2% interanual y de un 20,2%, respecto del promedio reciente.
El reporte detalla que la campaña anterior estuvo condicionada por “La Niña”, que restringió las lluvias durante la siembra. En contraste, este ciclo transita hacia condiciones climáticas “neutral cálidas”, lo que favorece mayores lluvias durante el otoño y durante la primavera. Esto genera expectativas de una implantación exitosa y un desarrollo del cultivo más robusto.