El Gobierno tacha los días en el calendario para que el productor liquide la cosecha gruesa. Hasta el momento, se ve un retraso importante en la venta de soja, pero se espera que en el corto plazo la situación se regularice.
La buena noticia para el presidente Javier Milei y la industria aceitera es que el 70 % de los productores venderá más de la mitad de su cosecha. Este dato se desprende del informe Ag Barometer de la Universidad Austral que destacó que el sector productivo tomará esta decisión para cubrir los compromisos financieros.
“Este es un dato importante porque puede servir para estimar los niveles de ventas de los productores. Estos datos resultan importantes tanto para la industria procesadora como para el gobierno en términos de ingresos de divisas, ya que estas resultan claves para el programa financiero del Gobierno, cuyo objetivo central es la unificación cambiaria y el levantamiento del cepo”, destacó el informe.
A pesar de este escenario, las ventas todavía son bajas. Esto se explica debido a la expectativa que tiene el productor de ver una mejora en los precios internacionales de los granos. “Sin duda, los compromisos financieros pueden acelerar el ritmo de ventas de los productores”, remarcó la encuesta.
El relevamiento arrojó que, durante marzo y abril, el 30 % de los productores consultados manifestó que tendrá que vender el 75 % de su producción de soja y maíz para cubrir todas las obligaciones financieras de la campaña. A este porcentaje se suma un 39 % adicional que piensa que necesitarán vender un 50% de su producción.
Para no retrasar la venta por parte del sector productivo, el Ejecutivo aclara constantemente que no habrá devaluación o levantamiento del cepo. La posibilidad de alguna de estas decisiones en el corto plazo otorgaría una mejora en los precios, lo que haría que el productor retrase las ventas.
“Nos dicen que no sacamos el cepo del día uno. Si sacábamos el cepo del día uno, hubiera sido un desastre. Si lo sacáramos hoy sería inapropiado. Pasamos de calamidad a inapropiado”, dijo el ministro de Economía, Luis Caputo. Sobre el valor del tipo de cambio, aclaró: “No tiene ningún sentido convalidar este error de pronóstico con una devaluación, eso es lo que ha hecho la Argentina siempre, es una tontería. Tenemos que ganar competitividad bajando impuestos, no devaluando”.
Escenario productivo
Más allá de la decisión de vender o no, el relevamiento de la Universidad Austral reflejó que hay expectativas positivas para los próximos 12 meses. La medición mostró que se mantiene el optimismo de los productores.
Por otra parte, el índice de Condiciones Presentes mejoró con relación al año anterior (110 vs 22). Se debe a los buenos rendimientos que se obtienen en la campaña 2023/24.
“A los productores agropecuarios, de alguna manera, le resultan positivos los principios generales de la Ley Bases, al igual que el grueso de la población que piensa que el gobierno está en el sendero correcto. La búsqueda prioritaria por bajar la inflación, que se va a traducir en bajas en las tasas de interés, puede constituir un aliciente para la realización de inversiones”, explicó Carlos Steiger, director de la encuesta.
Producción de trigo
El informe reflejó que el financiamiento de la siembra de trigo 2024/25 se realiza en su mayoría con fondos propios de los productores, canje a cosecha y financiamiento de los proveedores de insumos. Del relevamiento se desprende que el 50 % de los productores financió la siembra de trigo con fondos propios, un 29 % con canje a cosecha y un 12 % se financió con proveedores de insumos.
“Prácticamente, no hay financiamiento bancario, aunque es de esperar que en el futuro cambie el comportamiento de los bancos comerciales con tasas de interés a la baja, dejando de financiar al Estado y cumpliendo su rol de otorgar créditos al sector privado: motor de la economía”, señalaron los especialistas de la Universidad Austral.