Técnicos del INTA Rafaela y del Conicet aseguran que es ineficaz frente a este parásito. También afirman que el uso masivo derivó en la aparición de poblaciones de parásitos resistentes a esta droga.
Un estudio realizado por investigadores argentinos y brasileños reveló la resistencia de la garrapata común del bovino (Rhipicephalus microplus) a la ivermectina.
Santiago Nava, uno de los autores del estudio e investigador del INTA Rafaela y del Conicet, detalló que “la ivermectina ha demostrado ser un antiparasitario altamente eficaz, sin embargo, su uso masivo ha derivado en la aparición de poblaciones de parásitos resistentes a esta droga”.
EL ESTUDIO
El estudio comprendió pruebas in vitro en laboratorio, donde se utilizaron larvas de la garrapata provenientes de establecimientos ganaderos de Santa Fe, Entre Ríos, Chaco, Formosa, Santiago del Estero y Misiones, y también pruebas de campo en las localidades de General San Martín, en Chaco y de la localidad de “El Colorado”, en Formosa, donde se testeó la eficacia de la ivermectina para controlar infestaciones naturales en bovinos.
El desafío de cara al futuro es la resistencia: “En el caso particular de la garrapata común del bovino, en la Argentina ya se han detectado casos de resistencia a prácticamente todos los compuestos químicos garrapaticidas disponibles comercialmente”, resaltó Nava.
LOS RESULTADOS
Con respecto al estudio in vitro, se vio que la respuesta fenotípica de las poblaciones analizadas no fue uniforme, ya que cinco fueron clasificadas como susceptibles, cuatro como resistentes y en una se identificó resistencia incipiente.
Las pruebas de campo confirmaron los resultados obtenidos en los test in vitro.
El investigador sostuvo que para “comprobar la extensión del problema de la resistencia a las ivermectinas se deberían repetir ensayos a campo similares en otros establecimientos ganaderos de nuestro país”.
LA ESPECIE
La garrapata común es la especie con mayor incidencia para la producción ganadera mundial.
Se la asocia a la disminución en la ganancia de peso, daño de los cueros, mortalidad, menor producción láctea, así como a la transmisión de enfermedades como la babesiosis y anaplasmosis bovina.
En nuestro país, afecta aproximadamente a 16 millones de bovinos en zonas tropicales y subtropicales del NEA y NOA.
RESISTENCIA A LA DROGA
La ivermectina es una lactona macrocíclica utilizada como un antiparasitario que actúa contra parásitos internos y externos de distintas especies animales.
Según el investigador, la resistencia está asociada a la frecuencia de los tratamientos garrapaticidas empleados, y estos son más numerosos en aquellas zonas con mayor aptitud ecológica para el parásito.
En el caso particular de la Argentina, corresponden a áreas del litoral en la región noreste del país, aseguró el técnico del INTA y Conicet.
Las herramientas para el control surgen de la aplicación de “acaricidas químicos sintéticos, que incluye, además de las lactonas macrocíclicas, a los piretroides y fosforados, las formamidinas, los fenilpirazoles y los inhibidores de la síntesis de quitina como el fluazurón”, señaló Nava.
En este sentido, el especialista reconoció que métodos de manejo como el descanso de pasturas o las vacunas contra garrapatas no constituyen una alternativa que en el escenario actual puedan sustituir a los químicos sintéticos, ya sea por problemas de factibilidad en la aplicación, para el caso del descanso de pasturas, o directamente por una ineficacia o falta de disponibilidad de un producto comercial aprobado oficialmente como en el caso de las vacunas contra garrapatas.
“Esta situación resalta la necesidad imperiosa de utilizar los acaricidas químicos de manera adecuada a fin de preservar su funcionalidad, porque en la actualidad no hay herramientas sustitutas factibles de aplicarse con alta eficacia y de forma masiva”, resaltó.
El especialista del INTA y del Conicet indicó la necesidad de propiciar la implementación de estrategias que disminuyan la frecuencia de aplicación de los acaricidas químicos, a fin de prolongar en el tiempo la presencia de poblaciones de garrapatas susceptibles a los mismos y para evitar los efectos ambientales colaterales que este conlleva.
Fuente: Infocampo