El Senasa, junto a otras entidades públicas, puso en marcha un proyecto de estímulo para el desarrollo y saneamiento de los tambos de la agricultura familiar.
La Licenciada Nidia Juri, Psicóloga social y referente de Agricultura Familiar de Senasa en el Noa, explicó en el programa Suena a Campo conducido por Gabriela Medina, que se trata de un trabajo que Senasa realiza desde hace años orientado a la agricultura familiar con la necesidad de incorporar a otros organismos para poder abordar temas puntuales teniendo en cuenta la diversidad de actividades que integran la agricultura familiar.
Específicamente, el proyecto, elaborado en 2019 por la Dirección Nacional de Sanidad Animal y la Coordinación de Agricultura Familiar del Senasa, busca generar acciones que contribuyan a cumplimentar los requisitos normativos obligatorios que permitan mantener a los rodeos familiares libres de brucelosis y tuberculosis, dos enfermedades de relevancia zoonótica y económica en la producción lechera.
Para comenzar se trabaja en hacer visibles a los tambos de agricultura familiar y acompañar a los productores con el fin de fortalecer el sector de la agricultura familiar en la producción tambera para que puedan trabajar con las condiciones sanitarias adecuadas.
Para la licenciada, la importancia del control de estas zoonosis a nivel social tiene dos planos. Por un lado, la producción lechera y de subproductos que llega a las mesas de los consumidores, lo que requiere de un control de calidad sanitaria. Por otro lado, el contacto de las familias productoras con los animales que los expone a contraer estas enfermedades zoonóticas.
Junto a Senasa, trabajan técnicos de la Secretaría de Agricultura Familiar Campesina e Indígena, el Ministerio de Desarrollo Productivo de la Provincia, la Municipalidad de Trancas, INTA, Dirección de Zoonosis, y la Mesa de Lechería. Actualmente los organismos realizan una prueba piloto en la zona de Trancas, que ha sido elegida ya que contiene a la cuenca lechera tucumana. “Senasa es un organismo que tiene una función fiscalizadora de control y también una función normativa, entonces, trabajar con las instituciones que tiene esa función de extensión para nosotros resulta fundamental” expresó.
La especialista destacó la importancia de contar con sistemas de registros y georreferencias de la producción animal y vegetal con el fin de facilitar los controles. Dicho registro es el Renspa donde figuran para Tucumán sólo 13 tambos lo que lleva a pensar que queda mucho trabajo por hacer ya que en la provincia existen muchos tambos más, y es el primer ítem a resolver.
“El proyecto platea el registro como primera necesidad, ya que, para que un productor pueda blanquear su producción, necesita cumplir con requisitos que le significan un costo, ya que se deben tomar muestras y analizarlas para detectar las enfermedades, y eliminar a los animales enfermos. Esto forma parte de una serie de exigencias sanitarias que, al ser una zoonosis no podemos evadir ni evitar” explicó la entrevistada.
El proyecto de «Intervención Sanitaria Oficial en Rodeos Familiares NOA-NEA» de Senasa ha dado inicio con un curso. Dicho curso virtual, de un mes de duración, tiene por objetivo principal dar respuesta a una problemática planteada desde el sector tambero de la Agricultura Familiar y visualizada desde las autoridades sanitarias a través del trabajo realizado junto a otras instituciones – como la Secretaria de Agricultura de la Nación Campesina e Indígena, el INTA, la Universidad Nacional de Jujuy y ministerios provinciales – en cada territorio en donde se llevará adelante el proyecto.
El curso, como primera acción de un proyecto de intervención, no es solo de contenidos sino un medio a través del cual los representantes de las instituciones que acompañan al sector tambero familiar, puedan compartir e intercambiar sus experiencias de trabajo y enriquecer mutuamente sus expectativas para este proyecto ya que ellos son los que los llevarán adelante en cada territorio.