Como cada fin de año, Suena a Campo realiza un balance de lo que ha representado el período que finaliza para las diferentes producciones agrícolas y pecuarias y por supuesto es de suma importancia todo lo que tenga que ver con la economía de nuestro país.
Consultado por Suena a Campo, el Lic. en Economía Eduardo Róbinson, opinó que se ha tratado de un año sumamente complicado en materia productiva por lo que ha representado la pandemia y como consecuencia la paralización de muchas actividades.
Para Róbinson hoy en día el panorama es un tanto esperanzador por la aparición de la vacuna, sin embargo, las condiciones sanitarias generan gran incertidumbre y bajo estas condiciones las actividades productivas se desarrollan de manera muy heterogénea dependiendo el rubro.
“Existen sectores que se han visto severamente castigados como ser el turismo, los servicios, la gastronomía. En lo que respecta a la agroindustria, en nuestra provincia hemos tenido altibajos durante el invierno que es donde se desarrollan las principales actividades de Tucumán como la zafra cañera y la citricultura, sin embargo, se han logrado resultados similares a lo que se ha visto en los últimos años” dijo.
Por este motivo, mientras que a nivel nacional se ha registrado una caída de la economía de entre el 10 y el 12%, a nivel provincial, estos valores se encuentran en el orden del 4 al 6%, por lo que se puede decir que Tucumán ha logrado mantener los principales ejes de su actividad económica relativamente estables.
Últimos días de 2020
En los últimos días del 2020, como todos los años, las empresas y sectores productivos comienzan a realizar proyecciones y posibles escenarios para el año que comienza, sin embargo, en esta ocasión genera gran incertidumbre el no saber qué va a suceder en lo que respecta a condiciones sanitarias y actividades económicas.
Para los próximos días, se espera una leve recuperación en el consumo en comparación de los meses anteriores ante el pago de los aguinaldos y algunos bonos y compensaciones que se van a otorgar, por lo tanto, se espera un mejor movimiento a nivel comercial, pero en valore muy acotados.
Medidas del Gobierno
Las iniciativas del gobierno tienen la intención de moderar la suba de precios, especialmente en sectores sensibles como los de los alimentos. En el caso de las carnes, es posible que en días previos a fin de año se consigan en las góndolas cortes a precios populares. Sin embargo, este programa, si bien estimula el consumo, no va a perdurar por tiempos prolongados debido a que esos bajos precios no se trasladan a los costos del productor y la cadena de comercialización.
En lo que respecta a los feed lots y la cadena comercializadora de las carnes, el licenciado opinó que esta medida no generaría un gran impacto ya que la medida no podrá prorrogarse en el tiempo teniendo en cuanta que los márgenes rentables de la actividad son ya bastante estrechos.
Reactivación del comercio
Róbinson señaló que, en el mejor de los escenarios, el consumo en las fiestas de fin de año podría aproximarse a valores del año pasado dentro de un cuadro social complejo donde 4 millones de personas han perdido sus empleos, muchos sectores han reducido sus niveles productivos, y el índice de pobreza indica que el 44% de la población ha caído bajo esa línea.
“No esperamos una recuperación de la economía muy robusta, por el contrario, en el mejor de los casos las ventas serán similares a las del año pasado y la gente va a tender a cuidar sus recursos porque no estamos seguros de lo que va a suceder, el endeudamiento ha crecido por parte del sector privado y el margen para créditos es muy estrecho” explicó.
Perspectivas para el 2021
Según el licenciado, los aspectos sanitarios van a continuar siendo una condicionante durante los primeros meses de 2021 ya que si bien, se ha encontrado una vacuna, es un proceso que recién comienza y los programas de vacunación llevarán su tiempo.
Por otro lado, se espera una recuperación económica que va depender de la velocidad de las expectativas que se vayan generando, pero, en términos generales se han planteado escenarios relativamente normales con un lento proceso de reactivación económica y normalización de las actividades.
“No vamos a recuperar lo que perdimos este año. Tenemos un acuerdo con el FMI, se espera que se legue a un acuerdo con el organismo en el primer trimestre del año, lo que va a generar algunas expectativas condicionada por numerosos factores, pero siendo optimistas creo que vamos a ver una recuperación de la actividad económica modesta, una inflación más elevada que la que hemos tenido este año que va a rondar el 50%, y el descongelamiento de las tarifas” señaló.
Finalmente, Róbinson destacó que, las tres claves serán:
- Cómo se recuperan las actividades económicas sujetas a la pandemia,
- Qué sucederá con el tipo de cabio y la inflación
- y el deterioro de los salarios.