En el marco del día de la porcicultura, se conoció la noticia de que Tucumán contará con un servicio público de diagnóstico de Triquinosis que se realizará en el laboratorio Labrydea de la facultad de Agronomía y Zootecnia. Este hecho es muy importante para el sector porcino. Sobre todo para la agricultura familiar, que aún realiza la faena en el campo. Asimismo es un gran avance en materia de salud pública.
En entrevista con Suena a Campo la ing. Zootecnista y extensionista en la Agencia de extensión rural INTA Monteros-Tucumán, Ruth Macedo, explicó que la triquinosis es una enfermedad parasitaria y zoonótica, es decir, que “los animales nos pueden contagiar”. En este caso es una zoonosis alimentaria. La persona se contagia por el consumo de alimentos que contienen este parásito.
Los alimentos que pueden contener el parásito son los que vienen, especialmente, de la carne porcina. La misma puede encontrarse mal cocida, o en productos elaborados como los chacinados -que no son cocidos, sino previamente desecados o con un proceso de salazón-.
Cabe destacar que esta enfermedad es producida por un parásito que muere en temperaturas mayores a 60 grados. “En el caso de los productos chacinados que se hacen con carne cruda -chorizos secos, salamines o bondiola-, es donde se encuentra el peligro porque en el proceso de secado y salazón el parásito no muere”, señaló Macedo.
Por este motivo, la carne de donde provienen estos alimentos no tiene que estar contaminada.
“A simple vista, no podemos saber si un chacinado está contaminado, es por eso que el productor tiene que tomar conciencia que debe producir alimentos sanos”.
Diagnóstico de triquinosis
La presencia de este parásito se diagnostica con un análisis de laboratorio. El mismo se realiza post mortem, es decir luego de que el productor ha faenado el animal. Se analiza una muestra de la carne para confirmar que no está infectada y puede elaborar su chacinados sin problemas.
Es importante que el productor tenga en cuenta que los animales no manifiestan síntomas ante la presencia del parásito. Los cerdos infectados muestran buen ánimo al comer y no presentan síntomas de decaimiento.
Síntomas en personas contagiadas
Este es un parásito que se aloja en los músculos. La persona contagiada con triquinosis presenta síntomas muy similares a la gripe. Además puede manifestar síntomas gastrointestinales, dolores musculares intensos, hinchazón de párpados, rechazo a la luz y picazón. “Al tener sintomatología muy similar a otras enfermedades es difícil identificarse”, resaltó la ingeniera.
Primer servicio de diagnóstico público
Actualmente Tucumán solo cuenta con diagnóstico para triquinosis en los frigoríficos habilitados. Estos establecimientos cuentan con un pequeño laboratorio que lleva a cabo el análisis y habilita las carnes para el consumo.
“Pero como sabemos, en el campo la faena casera es muy común. Esta carne, al no pasar por un frigorífico ni por controles veterinarios, no se puede saber si está infectada con el parásito de la triquinosis. Los productores familiares no cuentan con un diagnóstico para esta afección, ni tampoco cuentan con una oficina de bromatología municipal donde puedan llevar a analizar una muestra de su carne”, indicó.
Consultada por los detalles del proyecto, Macedo comentó que fue un trabajo interinstitucional llevado a cabo con la facultad de Agronomía y Zootecnia, y el INTA. El resultado que dejaron estos esfuerzos, es el primer lugar donde el productor familiar podrá llevar su muestra y contar con este servicio de diagnóstico.
El servicio se encontrará disponible en el corto plazo. Funcionará los días viernes, dónde el productor podrá llevar una muestra. La encargada de la realizar las determinaciones es la doctora Carolina Cizek. Quien a su vez, es la encargada de la cátedra de enfermedades transmisibles de porcinos de la facultad.
“Nosotros, le pedimos a los productores que se comuniquen con la doctora antes de llevar la muestra”, manifestó.
Toma de muestra
Por lo general los productores comienzan muy temprano con la faena. “La idea es que antes de empezar con la elaboración de chacinados, saquen una muestra del diafragma de los animales (entraña)”.
El diafragma es un músculo que se identifica perfectamente por los productores, cercano a las costillas. La muestra debe ser de 100 grs. No debe frizarse, debe trasladarse en bolsa limpia al laboratorio.
“Esperamos que los productores familiares utilicen este servicio”. Tienen que estar registrados en el RENAF o RENSPA para ser eximidos del pago del mismo.
“Porque justamente es una política pública de promoción para que el productor haga este tipo de análisis, y tenga la seguridad de no enfermar a su familia con la producción de sus chacinados”.
Por último Macedo pidió a los productores que se acerquen al INTA o a la Facultad de Agronomía y Zootecnia para informarse mejor y recibir el asesoramiento correspondiente.