“La campaña finalizada de poroto en Tucumán y en la región resultó muy benigna, principalmente en los aspectos climáticos: las lluvias acompañaron en milímetros caídos y distribución, desde el momento mismo de la siembra, realizada en febrero, por lo que los cultivos se manifestaron adecuadamente”, contó Oscar Nicéforo Vizgarra, coordinador del programa Legumbres Secas de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc).
Añadió que durante abril, y con los cultivos desarrollándose, faltó un poco de agua, por lo que en general se lograron granos de menor tamaño. No obstante, en general se dieron buenos rindes, y solo se registraron caídas importantes de producción en zonas donde las lluvias fueron casi nulas.
En el aspecto sanitario, sólo aparecieron problemas de bacteriosis, mancha angular y algunas virosis, sin contundencia ni presión, nada importante. “Los cultivos terminaron bien; las heladas se presentaron de manera tardía, cuando las plantas estaban entregadas, completando su ciclo”, dijo.
Vizgarra añadió que la trilla está finalizada casi en toda la región, con una producción de 30.000 toneladas de poroto negro y de 5.000 toneladas de rojo en Tucumán, casi todo de menor tamaño de grano. A nivel país se considera que se produjeron unas 180.000 toneladas de negro, unas 80.000 de porotos de otros colores y unas 200.000 toneladas de blanco.
“Puedo decir que los rendimientos logrados fueron buenos a nivel país, con muy buena calidad, pero en general con tamaños menores a los promedios”, indicó.
En cuanto a lo comercial, dijo que se está registrando una falta de barcos para lo exportado, con una suba importante en el costo del flete. “Lo bueno es que los precios están acompañando y están dando un alivio al productor. Esto se debe a que Brasil no tuvo buena cosecha, por lo que los valores que se consiguen son bastante interesantes”, precisó.
Fuente: La Gaceta