La presencia de pulgón amarillo avanza sobre Chaco, Formosa y Santiago del Estero. Ante esta situación, el INTA alertó a los productores y destacó la importancia del monitoreo permanente.
Desde el INTA señalaron que el pulgón amarillo del sorgo (Melanaphis sacchari) es considerado una de las plagas más dañinas para el cultivo. Esta plaga se alimenta de la savia, reduce la absorción de nutrientes que podrían ser utilizados por la planta para crecer, desarrollarse y formar granos.
Violeta Casuso, especialista en entomología del INTA, expresó que las principales localidades afectadas son la Las Breñas, Colonia Elisa, Hermoso Campo, Charata, General Pinedo, Tres Isletas ubicadas en la provincia de Chaco, Bañaderos, provincia de Formosa y El Caburé en Santiago del Estero, donde se registraron colonias de esta plaga en las hojas inferiores de los rebrotes de cultivos de sorgo, en hojas y cerca de las raíces de los sorgos de Alepo. “El pulgón amarillo coloniza el cultivo cuando las plantas tienen entre dos y tres semanas de edad”, aclararon los técnicos.
A partir de los 72 días después de la siembra, se produce un aumento poblacional progresivo de la plaga por encima de los niveles críticos, es decir, 50 pulgones por hoja. “Si no se frena a tiempo, la plaga llega al efecto grupo, el pulgón alcanza el hacinamiento y provoca una disminución en el valor nutritivo de la planta”, destacó el INTA.
Esta situación obliga a que las hembras produzcan individuos alados, que son los responsables de la dispersión de las poblaciones, colonización de nuevas plantas y daño de tipo indirecto que consiste en la transmisión de virus. “En lotes donde el problema no fue atendido, la producción se redujo hasta un 100 %”, afirmaron desde el INTA.
Pulgón amarillo
Ante este escenario, desde el INTA brindaron recomendaciones para mitigar los daños. “En el proceso previo a la siembra resulta importante conocer cuál es la situación del lote en cuanto a la presencia del pulgón amarillo y eliminar los posibles focos de infestación mediante la observación de sorgo de Alepo o rebrotes de sorgo, evitando el cultivo de estos últimos y, de esta manera, focos cercanos”, aconsejaron.
Por otra parte, resaltaron lo conveniente de identificar la presencia de insectos benéficos que podrían colaborar en el control de esta plaga. Si se detecta la presencia de la plaga, el productor debe incrementar el monitoreo. “Se recomienda realizar un control químico cuando el 20 % de las plantas de sorgo presenten 50 o más pulgones por hoja en etapa vegetativa y cuando el 30 % de las plantas de sorgo presenten 50 o más pulgones por hojas en la etapa reproductiva”, agregó la técnica.
Fuente: News Agrofy