José Cebe, socio de la empresa Frutucuman contó en primera persona para Suena a Campo, lo que se vive en el sector arandanero, “la competencia nos está matando”, manifestó.
Frutucuman es una empresa que se creó en el año 2008. La misma está compuesta por cuatro productores familiares, que por la necesidad de captar más eslabones en la cadena- en este caso la exportación-, se juntaron y por medio de Frutucuman exportan las producciones que cada uno realiza.
Hoy, comercializar al exterior este tipo de fruta desde Tucumán sobre todo, resulta complicado. Según Cebe, el altísimo costo de la logística para exportar; la falta de políticas que sostengan a las economías regionales; y la pérdida de competitividad respecto a otros países productores están haciendo que cada vez más productores dejen la actividad.
El mayor problema es la pérdida de competitividad
“Los desafíos no son solo para el arándano, sino para todas las economías regionales del país que están pasando por situaciones similares”, manifestó. En el caso de la berry, Cebe dijo que “la realidad es que países como Perú y Chile, que tienen otro origen de arándan,o nos están matando como competencia. Los costos de ellos son muy distintos a los nuestros. A medida que pasan las campañas, ellos producen más y mejor con menores costos, y un menor gasto logístico. Y nosotros, en cambio, nos vamos quedando cada vez más, nos vamos achicando como productores”.
Consultado por las alternativas que están tomando para mitigar esta problemática, Cebe dijo: “Nosotros al arándano lo producimos y exportamos como fruta para consumo. A medida que iba pasando el tiempo, y haciéndole frente a esta competitividad, los productores lo que hacíamos era certificar los campos para orgánico, y también buscar variedades que nos permitan exportar vía marítima”.
Según lo viralizado en un video la semana pasada, se hicieron varias inversiones en el aeropuerto Benjamín Matienzo de Tucumán para exportar arándanos vía aérea, “y esto hoy no ocurre porque nos cuesta muy caro en comparación a la exportación por vía marítima”. Aunque para ir por mar, primero hay que llegar vía terrestre a los puertos, lo que también encarece el costo logístico y se debe contar con variedades que aguanten el trayecto.
“Yo creo que ayudaría o sería una posible solución la apertura comercial del país hacia el mundo; como así también generar alianzas comerciales; y sobre todo buscar ser más atractivos para la industria logística, ya que hoy faltan contenedores”, señaló Cebe.
La logística marítima “te maneja el negocio”
“Hoy la logística marítima te maneja el negocio, porque uno pacta que en 25 a 30 días llega la mercadería al cliente y luego por falta de tripulación, contenedores o problemas propios de la industria de transporte la mercadería no llega a tiempo a destino. Estás carencias hacen notar que Argentina dejó de ser un país atractivo para la industria logística”, indicó.
“Nosotros además somos productores y exportadores de limones y naranjas. La principal diferencia es que con el arándano se vive en constante emergencia, durante toda la campaña. El limón también está sufriendo una pérdida de competitividad en el mercado mundial. Por eso creo que el problema es a nivel de economías regionales”.
Cebe además comentó que desde APRATUC, la asociación que nuclea al sector arandanero, tratan estas problemáticas y defienden a los productores de arándanos.
Consultado por las expectativas para el próximo año, “hay muchos productores de arándano que están desapareciendo. El arándano es una actividad que da muchísima fuente de trabajo. Y la actividad hoy se encuentra en peligro de extinción. Estamos viendo cómo desaparecen los campos de fruta. Por eso, en cuanto a las expectativas no te sabría decir. Porque en este momento lo que hacemos año a año es sobrevivir a la actividad, buscar nuevos mercados y negocios”, finalizó.