Recientemente se percibió una fuerte suba en el precio del huevo. Por otro lado, existe preocupación por el mercado de granos y posibles faltantes de insumos para la producción avícola.
El ing. zootecnista, Marcos Auat se refirió a la suba en el precio del huevo, y dijo que «claramente para el consumidor es una fuerte suba, pero desde el sector se habla, en realidad, de una recomposición del precio. Todos los productores avícolas y allegados a la actividad saben que el huevo venía con un atraso en su precio, y una distorsión extremadamente grave respecto de los costos de producción«.
Este problema causó que numerosos productores abandonaran la actividad por falta de rentabilidad.
Hoy podemos encontrar en Tucumán la bandeja de huevos de calibre 1 en 500 pesos. «En barrios de mayor poder adquisitivo ya se registraron ventas de hasta 600 pesos por bandeja«, señaló Auat.
Es importante dejar en claro que esto no es un fenómeno inflacionario. Sino que se trata de una recomposición sectorial que se dió por una estabilización de mercado. «Donde hubo productores que dejaron la actividad, y por otro lado la creciente demanda de granos en el mercado internacional que dispararon los precios«, explicó Auat sobre los factores que hicieron disminuir la oferta de productos avícolas y la consecuente suba en el precio.
Consultado por las diferencias en el precio del huevo blanco vs el rosado, Auat indicó: «existe una diferencia entre el 7 y el 9% entre el huevo blanco que es más económico y el rosado. Esto se podría justificar porque hay una pequeña divergencia en los costos de producción. Siendo el huevo rosado más caro de producir por el mayor tamaño de los animales y un mayor consumo. Por otro lado, existe una mayor demanda de huevo fresco asociado al color rosado».
Situación de la avicultura luego de las altas temperaturas, sequías y luego inundaciones
«Las altas temperaturas, sequías y posteriormente inundaciones fueron el corolario del año 2021, donde la situación del sector ya se tornaba insostenible. Además se registraron altas cifras de mortandad de aves en la zona núcleo de la avicultura como Buenos Aires y el Litoral», manifestó Auat.
En cuanto a las pérdidas de animales, se estima que las bajas fueron entre el 8 y 9% del stock nacional de aves. Esto significa una cifra aproximada de 4.000.000 de animales perdidos por golpes de calor. «Esto, sumado a otros factores como el no ingreso de reproductores del exterior. Y además la cotización internacional de los granos, que no tiene relación con el precio del huevo, hizo que el mercado avícola empiece a acomodarse por una disminución en la oferta», explicó Auat.
Y agregó: «ahora los productores tienen una ligera posibilidad de recomponer sus actividades, desde el punto de vista de la inversión, reposición de aves y el pago a proveedores». Cabe destacar, que estos últimos también se vieron muy afectados por la situación, ya que los productores se encontraban imposibilitados para llevar al día las cuentas.
A su vez, Auat brindó su observación sobre el mercado de granario y la forma en que repercute en Tucumán. «No existe un faltante físico de granos pero si hay menos disponibilidad de precios en los mismos. Esto es porque la creciente demanda internacional hace que los valores fluctuen a diario. Asimismo, los tenedores de maíz y soja esperan para vender sus productos por especulación de subas en los precios«, aseguró. Por otro lado, «para la cosecha que viene se estima que será menor la producción«.
Situación de pollos parrilleros
En cuanto a posibles subas en el precio de la carne de pollo, Auat refirió: «yo creo que las subas en el precio del pollo no serán tan significativas para el consumidor final como ocurrió con el huevo. La relación costo/beneficio tuvo una recomposición hace unos meses. Aunque por el menor ingreso de reproductores es posible que se perciban faltantes de pollitos para la producción de carne«.
Proyecciones de la actividad avícola para este año
Auat estimó que «este 2022 será un año para sanear las cuentas de las empresas avícolas. Y a su vez, se podrá pensar en inversiones para el sector. Algunas empresas más organizadas quizás puedan proyectar algún tipo de crecimiento para el año 2023«.
Como recomendaciones para proteger las producciones, Auat destacó que la avicultura es una actividad absolutamente relacionada al capital, pero que tiene una rápida rotación. «Siempre apuntamos a que los productores avícolas aumenten su eficiencia; acorten o mantengan su ciclo productivo; y traten de tener el retorno de su inversión lo más rápido posible. De esta manera, aprovechar un tiempo con utilidades reales«, finalizó.