La primera cumbre de innovación en cultivos de Bayer, llevada a cabo en Nueva York comenzó con una premisa tan clara como preocupante: las proyecciones mundiales indican que habrá que alimentar a más gente con menos tierra disponible para la agricultura. El cambio climático -y la guerra en Ucrania como un elemento que impactó de lleno en las previsiones- modificó por completo el abordaje del agro y para poder lograr una seguridad alimentaria alrededor del mundo será clave el rol de las principales empresas que trabajan con insumos agrícolas.
Consciente de este presente, pero, sobre todo, tratando de anticiparse a lo que vendrá, Bayer presentó nuevas tecnologías para la agricultura regenerativa que le permitirá duplicar sus mercados accesibles y potenciar más de 161 millones de hectáreas (400 millones de acres) a nivel global.
Rodrigo Santos, jefe de la división Crop Science, fue el encargado de abrir el evento y marcó la línea de la compañía: “Bayer ve los desafíos y estamos motivados en aplicar la ciencia de manera más profunda para generar soluciones más sostenibles y cambiar las proyecciones mundiales”. El resto de los oradores, que dieron detalles sobre los planes futuros de Bayer en cada una de las áreas, fueron Jeremy Williams, a cargo de Agricultura Digital, Frank Terhost, titular de Estrategia y Sustentabilidad, Robert Reiter, jefe de Investigación y Desarrollo, Mike Graham, de Breeding, Kelly Gillespie, vicepresidenta de Ecosistemas Digitales, Axel Trautwein, del departamento de Ciencia Regulatoria, Jessica Christiansen, jefa de Sustentabilidad y Negocios, y Tom Eickhoff, cabeza del área de Soluciones Digitales para la Agricultura.
Los principales directivos coincidieron en que la expectativa de la empresa es acceder a más de 100 mil millones de euros de valor en mercados accesibles y relacionados a la agricultura, lo que significaría duplicar el mercado potencial de la división Crop Science, que hoy asciende a más de 100 mil millones de euros solo para el portfolio principal. En línea con esto es que, para 2035, el gigante farmacéutico prevé dar forma a la agricultura regenerativa en más de 161 millones de hectáreas.
Según explicaron, la inversión de los próximos años estará centrada en soluciones para los productores que contribuyan a la agricultura regenerativa. Esto incluirá la mejora de la productividad, el bienestar social y económico -de los productores y las comunidades-, la conservación del agua, la mitigación del cambio climático, la mejora de la salud del suelo y la conservación y la restauración de la biodiversidad.
Una de las novedades del evento fue la presentación de Preceon Smart Corn System, definido como la evolución en la producción de maíz. El sistema, optimizado por Climate FieldView, “ayudará a los agricultores a proteger sus cultivos y potenciar la toma de decisiones a lo largo de la temporada para lograr un éxito sostenido”, explicaron desde Bayer.
El objetivo, una vez más, es lograr una mayor producción en cada hectárea y con este sistema se obtendrá una mejor estabilidad en las plantas para que los híbridos de maíz de baja estatura permitan a los agricultores explorar densidades de plantación más altas. Sucede que la altura más baja de la planta habilita un momento de aplicación más flexible y la capacidad de usar equipos terrestres para otros insumos de cultivo, como fungicidas, insecticidas y nitrógeno. Otros beneficios de lograr plantas más bajas son que se reduce el riesgo de pérdidas por vientos fuertes, un acceso durante toda la campaña para un uso más preciso de productos fitosanitarios y aplicaciones de nutrientes, y el potencial para optimizar los insumos, las densidades de siembra y el posicionamiento del lote a través de herramientas digitales para brindar soporte a la siembra y mostrar la transición de la venta de insumos a la venta de soluciones.
Otro de los puntos en el cual hubo un importante énfasis fue las moléculas pequeñas sustentables para proteger cultivos. Bayer tiene intenciones de desarrollar un modo de acción de herbicida completamente nuevo para el control de malezas en áreas amplias, que sería el primero en la industria en más de tres décadas. Esta molécula ha demostrado un control efectivo de los pastos resistentes clave en la investigación y se espera que se comercialice a finales de esta década.
Aquí también incluyeron como ejemplos un nuevo fungicida de amplio espectro para cereales, maíz, frutas y verduras con potencial de gran éxito en la fase de investigación 3 y un nuevo modo de acción fungicida de horticultura de amplio espectro en la fase de investigación 2 con oportunidades para extenderse a los cereales y a la colza.
Todos estos casos, explicaron, son escenarios en los que la empresa aplica la inteligencia artificial. La meta de Bayer es diseñar la próxima generación de productos de protección de cultivos, centrándose en la sustentabilidad y en la reducción del impacto ambiental. Éstos permitirán a los productores “adaptar y orientar el uso de formas específicas, por ejemplo, mediante el uso de la tecnología PROTAC que se está desarrollando conjuntamente con Oerth Bio y que está diseñada para interactuar con una sola proteína objetivo y salvaguardar los organismos beneficiosos”.
Al respecto, Robert Reiter, jefe de Investigación y Desarrollo de la División de Ciencias de Cultivos, afirmó: “Una visión audaz requiere una inversión audaz. Se necesitan nuestras cinco plataformas de innovación: breeding, biotecnología, química, biología y ciencia de datos para impulsar esta gama de productos. Pero es mucho más que estas plataformas por sí solas: es la convergencia de esta innovación lo que nos permite generar soluciones sistémicas para resolver nuestros desafíos más apremiantes”.
Y agregó: “Los productores necesitan la mejor genética con los mejores eventos biotecnológicos de su clase, necesitan guías de siembra basadas en datos para saber cuándo y dónde sembrar esos cultivos. Y necesitan moléculas de productos de protección de cultivo pequeñas de menor impacto junto con soluciones biológicas de final de campaña y aplicaciones de precisión para proteger esos cultivos de manera sustentable. Tenemos una historia profundamente arraigada y estamos orgullosos de convertir con éxito estos motores en productos viables y valiosos para los productores”.
Nuevos mercados
El evento de Bayer también sirvió para que el gigante especializado en agro plantara sus ambiciones de mercado más allá de las agricultura regenerativa. Expertos en todas las áreas hicieron las presentaciones correspondientes y el foco estuvo puesto en cuatro ejes.
Fertilidad de cultivos y descubrimientos biológicos: con el objetivo de cultivar más con menos, reduciendo las emisiones y los costos, los directivos de la empresa sostuvieron que la tecnología que están desarrollando es “muy prometedora”. Uno de los grandes anhelos es reducir los residuos en la producción de frutas y verduras, un atributo cada vez más deseado por los consumidores.
Biocombustibles: el anuncio fue que la empresa CoverCress, de la que Bayer es accionista mayoritario, abrirá flujos de ingresos adicionales a partir de la venta del cultivo de cobertura del mismo nombre a los fabricantes de biocombustibles. Según explicaron, este aceite “está diseñado para lograr un puntaje de intensidad de carbono más bajo y se puede convertir en combustibles renovables sin competir con los cultivos alimentarios, debido a que se siembra entre campañas”.
Cadena de Valor Digital: aquí se destacó la herramienta Climate FieldView para ayudar a los productores a maximizar la productividad y la sustentabilidad de sus tierras y prácticas agrícolas. Bayer la definió como “la puerta de entrada para crear soluciones de cadena de valor, sirviendo como sistema de registro para las prácticas agrícolas climáticamente inteligentes de nuestros clientes y potenciando los programas globales de carbono”.
Agricultura de Carbono: una de las principales soluciones que la compañía le da a las productores es eliminar el carbono de la atmósfera y reducir sus emisiones. Por eso, lo que se planteó para el futuro es que la siembra directa habilitada por eventos tolerantes a herbicidas y el uso de cultivos de cobertura puede ayudar a mejorar la salud del suelo y reducir la erosión del mismo. Como beneficio adicional, la Iniciativa de Carbono de Bayer abre nuevas fuentes de ingresos para los productores al conectarlos con los mercados globales de carbono.
(Fuente: Infobae)