Recientemente, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) de Argentina ha tomado una importante decisión al prohibir el uso de productos formulados que contengan Fipronil, un insecticida ampliamente utilizado en la agricultura. Esta medida busca abordar las crecientes preocupaciones ambientales y de salud pública asociadas a este agroquímico. El ingeniero agrónomo Nicolás Auñon, en diálogo con SUENA A CAMPO, dio detalles del impacto que esto traerá en el sector agrícola.
¿Qué es el fipronil?
El fipronil es un insecticida descubierto por la farmacéutica Rhône-Poulenc entre 1985 y 1987 y que salió a mercado en 1993. Se utiliza para combatir plagas, y también patologías en animales . Tiene usos veterinario en perros y gatos, y también para controlar las pulgas, garrapatas, moscas o piojos en el ganado bovino, aunque se utiliza sobre todo para fumigar.
La Dirección Nacional de Protección Vegetal llevó adelante la revisión de los estudios ecotoxicológicos del principio activo Fipronil sobre la especia Apis mellifera, y luego aconsejó su prohibición por representar un riesgo para las abejas silvestres y melíferas, aun cuando se aplicasen las medidas adecuadas de mitigación.
En este sentido, el plazo dispuesto mediante la Resolución Senasa 425/2021 establecía un tiempo de 485 días hábiles para permitir su utilización a fin de «finalizar con los stocks disponibles» y que no se generen «partidas de este producto sin utilizar«, detalló.
Por lo tanto, las firmas titulares de los productos que al 3 de agosto cuenten con un remanente de las existencias oportunamente declaradas, deberán informarlo a la Dirección de Estrategia y Análisis de Riesgo perteneciente al Senasa, dentro de los 15 días corridos desde la prohibición para determinar su destino.
«Es un insecticida con toxicidad muy alta sobre abejas, se prohibió la formulación para mitigar el riesgo que tiene contra las abejas, que son unos insectos que cumplen un rol fundamental en la polinización de los cultivos. Hay otros productos que por el bajo efecto, como cebos o curasemillas, no generan el riesgo que sí generan otras formulaciones líquidas», advirtió el ingeniero que lidera la dirección de agroquímicos y biológicos del Senasa.
El profesional también se refirió respecto a las alternativas que se están considerando para reemplazar el Fipronil en la protección de cultivos aparecen otros insecticidas y piretroides. «Ahora no se podrá ni comercializar ni producir fipronil por lo que los productores deberán buscar otras alternativas como insecticidas y piretroides, además existe una norma de productos biológicos para que se generen alternativas de productos más amigables para el medio ambiente», expresó Auñon.
Según le adelantó a SUENA A CAMPO el ingeniero agrónomo, una resolución de bioinsumos, va a permitir la inscripción de nuevos productos, lo que dará mayor posibilidad a los productores de controlar las plagas en sus cultivos con mejor perfil ambiental y menor riesgo toxicológico. «El fipronil se utilizaba en varios cultivos, en frutales, industriales, soja, maíz, tenían varios usos y cuando se detectó que era muy tóxico para las abejas, avanzamos con su prohibición, por supuesto que es una buena noticia para los apicultores, porque esto disminuirá los riesgos de las poblaciones de abejas«, expresó.
El Senasa advirtió que en caso de incumplimientos o transgresiones a lo establecido en la Resolución 425, se sancionara al infractor de acuerdo a la Ley 27.233 y su Decreto Reglamentario 776 del 19 de noviembre de 2019, además de adoptar las acciones previstas en el Manual de Procedimientos de Infracciones del Senasa. «La prohibición entra en vigencia el 3 de agosto, incluye la utilización de estos productos, la comercialización y producción. Va a ser publicado en Boletín Oficial, por lo que todos estarán informados, además ya empezamos con las campaña en redes sociales y medios para que los productores estén al tanto y puedan tener las previsiones necesarias«, remarcó.
En relación al cumplimiento de la nueva normativa Auñon explicó como serán los controles. «El Senasa tiene un plan de monitoreo de residuos de fitosanitarios en productos vegetales, en caso de detectar en algún mercado que tenga residuos de este producto, el productor será notificado. Y se aplicarán las sanciones correspondientes«, finalizó.
(Fuente: Suena a Campo)