La ganadería vacuna quiere dejar atrás la sequía y las políticas actuales de desincentivo a la actividad para lograr darle un salto productivo, exportador y de generación de puestos de trabajos. Es por eso que la Mesa de las Carnes, entidad que agrupa a los principales actores de los diferentes eslabones de la cadenas de la carne bovina, porcina y aviar, presentarán los principales lineamientos en el Congreso de un plan para lograr dichos objetivos en un plazo menor a los 10 años.
De esta manera, mañana se dará a conocer en la Comisión de Agricultura y Ganadería de Diputados los “Lineamientos Estratégicos para la Cadena Bovina”, plan que de ponerse en marcha y concretarse los objetivos estipulados en el programa, significaría la creación de más de 114 mil puestos de empleo, acrecentar la producción de carne en un millón de toneladas y superar los USD 4.000 millones de exportación del sector en un plazo de 9 años hasta el 2032. “A eso hay que sumarle más de 200.000 fletes para trasladar esa producción y más de 2 millones de toneladas adicionales de maíz para consumo animal. Es un derrame en todo el sector y sus alrededores”, agregaron desde la Mesa de Carnes.
Para lograr estos objetivos, la cadena debe ir necesariamente hacia un marcado crecimiento productivo, que desde la Mesa de las Carnes estiman en un millón de toneladas para alcanzar las 4,2 millones de toneladas a 2032, lo cual implicaría un salto del 35% respecto a lo obtenido en 2022. Este incremento se lograría a partir de aumentar el peso promedio de faena de los animales y una mejora en la tasa de destete de los animales, que redundaría no solo en una suba de la producción, sino también en el número del stock de bovinos.
En cuanto al destete, el trabajo fija una meta de 75%, frente al 65,8% del año base. También se busca que el peso de faena llegue a los 275 kilos res, lo que implica 43 kilos adicionales.
Asimismo, esta producción de 4,2 millones de toneladas, se destinará un 43% a la exportación y 57% al mercado interno. “Es importante hacer énfasis en esto, para derribar el mito de que el abastecimiento interno y las exportaciones compiten entre sí, hay capacidad productiva para abastecer ambos mercados”, aclaran desde la Mesa.
Condiciones y resultados
Para lograr estos objetivos, es necesario generar determinadas condiciones, tanto por parte del sector como así también de las políticas aplicadas al sector. “El proceso participativo permitió establecer 4 áreas focales: cadena, producción, mercados y bienestar animal, ambiente e inocuidad, cada uno con diferentes ejes estratégicos”, marcaron desde la Mesa y plantearon que “como necesario partir de un marco macroeconómico ordenado, para que los ejes estratégicos y las políticas que de ellos derivan tengan impactos reales y duraderos. Lograr cero retenciones, cero restricciones, un dólar y reglas claras”.
De cristalizarse estas condiciones, desde la agrupación de entidades entienden que se podrían crear 114.623 puestos de trabajo entre los diferentes eslabones de la cadena, que llevaría a que el sector ocupe en total unos 546.068 trabajadores de manera directa. Asimismo, plantean que con “una mayor producción tanto para mercado interno como externo, crece la actividad económica”, por lo que estiman que el aporte total a la economía podría crecer USD 5.505 millones hacia 2032. “Esto significa que la facturación podría crecer hasta los USD 26.444 millones, un aumento del 26% respecto al año base”, destacaron.
Además, el complejo bovino generaría a 2032 un total de exportaciones por USD 8.582 millones, entre todos sus productos. El incremento con respecto al 2022, año base elegido por el trabajo, es del 102%, es decir, el equivalente a duplicar lo que exporta Argentina en la actualidad.
(Fuente: Infobae)