Luego de las lluvias de los últimos días, comenzó la campaña 2024/2025 de girasol, con varias semanas de retraso, reflejadas en una demora respecto al promedio histórico de 9,5 puntos porcentuales.
El panorama agrícola elaborado por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) puntualizó que, de los 1,85 millones de hectáreas proyectadas, se sembró el 3,2%. Los avances se relevaron en el NEA, Centro-Norte de Santa Fe y Centro-Este de Entre Ríos.
En tanto, en el resto de las zonas agrícolas, la intención de siembra de la oleaginosa parecería ganar peso con las expectativas de año seco, y la posibilidad de aprovechar la humedad disponible en el estrato superficial para la siembra.
Estimaban, además, que a estas condiciones se sumaría “la necesidad de buscar alternativas al maíz por el riesgo de afectación por chicharrita (insecto vector del Spiroplasma) hacen del girasol una opción interesante”. De todas maneras, la humedad superficial a la siembra es un factor crítico, dado que –al igual que en ciclos previos– en los núcleos girasoleros del norte la falta de humedad en los primeros centímetros del suelo podría limitar la siembra si no se reciben lluvias adecuadas en las próximas semanas.
(Fuente: Revista Chacra)